Mientras bajo por las escaleras hacia el auditorium recuerdo que esta vez el encuentro se ha ampliado al equipo directivo y mis colegas (jefas de u.t.p) deben estar atentas al saludo inicial y probablemente escuchando al sr. Denis Romero.
Por fin llegue, me inscribo (por segundo año consecutivo), recibo un bolsito con regalo incluido (una agenda y un lápiz institucional) y me acomodo a escuchar las últimas preguntas y respuestas sobre "Calidad en la enseñanza y los factores que la determinan".
Luego, me apresto a escuchar y tratar de entender la importancia de los puntajes de los ranking de notas del colegio, la verdad fue algo decepcionante escuchar que esta medida no tiende a ser tan significativa como se creía y solo se remite a ser una medida más para tratar de ser más justo en las diferencias entre estudiar en un colegio municipal, particular subvencionado y particular. (por lo menos son un par de puntos más para los buenos alumnos, diría un orientador optimista)
Antes de salir al primer piso nos piden que nos acercamos a sacarnos una foto oficial, me llama la atención que muchos no quieren, probablemente debe ser por timidez, aunque en mi caso, es que las veces que me saco fotos grupales nunca me ubico.
Me vuelvo a encontrar con mis colegas rumbo a un merecido coffe break (con tortas, galletas, etc), aunque me pierdo en unas mesas informativas sobre las diferentes carreras, además de aprovechar de hacer algún contacto para futuras visitas, ya que el próximo año el colegio donde trabajo tendrá hasta cuarto medio. (es una forma práctica de aplicar una de tantas competencias que debe tener un orientador)
Son cerca de las doce y comienza la última ponencia "Educación enfocada en la Felicidad", escuchamos atentos todos los participantes (más mujeres que hombres) y el sr. Jaime Larraín nos pide disculpas por lo que dirá y no dirá en su ponencia. Nos plantea que la educación y en si la vida debiera estar enfocada más en la búsqueda de la felicidad y del disfrute del día a día y no solo buscar el éxito por el éxito, aún cuando pudiese entenderse como una vida exitosa el poder disfrutar de los pequeños detalles de la vida.
Son pasadas las una de la tarde y nos retiramos, sin certificación (a lo mejor las enviaran al colegio), sin antes entregar la hoja de evaluación del seminario (mi evaluación fue casi perfecta).
Estimados lectores de la región de Valparaíso si tienen la oportunidad de ser invitados (sino fueran invitados le recomiendo enviar un e-mail a la universidad, solicitandola) asistan a este seminario, ya que la calidad de los expositores y la organización es excelente. Muchas felicitaciones a los organizadores y no olviden mis recomendaciones sobre temáticas más cotidianas de nuestro quehacer como orientadores y docentes.